Comprar llaves ajustables online
¿Qué son y su uso más común?
De la misma manera que las llaves fijas, las llaves ajustables son un tipo de herramienta de montaje, confeccionadas en material acero para ser fuertes y resistentes.
Las referencias que se tienen indican que la primera llave ajustable sería creada por Richard Clyburn a mediados del siglo XIX.
Se utilizan para apretar y para aflojar tornillos o tuercas. El uso es el mimo que las llaves fijas, aunque con la diferencia es que la boca de las ajustables está dividida en dos partes: fija y móvil.
La parte fija ha sido diseñada para desplazarse y así lograr la abertura que se requiere en cada trabajo (cómo para ajustarse a la tuerca o el tornillo que se desee enroscar.
Son muy utilizadas tanto a nivel particular, así como en pequeños o grandes talleres. Nos permiten gestionar movimientos manuales de torsión, no sólo para trabajar con tuercas o con tornillos, si no que también resultan muy prácticas para trabajar con bulones, pernos o con superficies cilíndricas.
Existen diferentes tipos de llaves ajustables. Antes de elegir una de ellas, es importante que sepas el uso exacto que se les puede dar según el tipo.
Tipos de llaves ajustables
Llaves clásicas
Llave ajustable de gran tamaño
Es una llave de grandes dimensiones que aparecerían inicialmente para tratar con ruedas de carreteras (por lo que también se le conoció cómo llave monkey, término que se puede traducir a nuestro idioma cómo “llave de mono”).
Llave ajustable BAHCO
La evolución de la clásica llave de Clyburn. Se consolidó a través de patentes que terminó por conseguir Johan Petter Johansson, quien trabaja en la empresa Bernt August Hjort & Company (más adelante en el tiempo sería abreviada pos las siglas de BAHCO).
Llave Stilson
Esta llave fue inventada en el año 1888, habiendo sido concebida especialmente para rotar tuberías. Este tipo de llave fue muy popular en los países de Europa.
Llaves ajustables actuales
Llave inglesa
Probablemente una de las herramientas más conocidas. Dependiendo del país, también se la conoce cómo Llave francesa, llave sueca, llave Crescent, etc.
Se caracteriza por presentar 2 caras lisas y paralelas que se disponen formando un ángulo de 15º en contraste con el mango. Una de las dos caras está fija, mientras que la otra será móvil, pudiendo abrirse y cerrarse de forma sencilla en base al trabajo que se tenga que realizar.
La cara fija cuenta con una cremallera dentada que se debe de girar de forma manual, propiciando la apertura o el cierre de las caras.
Una de sus destacadas ventajas es que, debido a esta característica regulación, se pueden usar en espacios muy reducidos.
Llave Stillson
(Llave de grifa o llave de perro): Sus caras tienen superficies dentadas o rugosas. El objetivo es lograr un buen agarre cuando estamos girando la llave. La mordaza inferior puede desplazarse hacia arriba o abajo según necesitemos.
Existen diferentes tipos de llaves Stillson (Rectas, acodadas, de palanca compuesta…)
Llave para caño
Está compuesta por dos mangos. En los dos hay una tuerca de regulación que se utiliza para abrir o cerrar las mordazas en un caño. Lo más habitual es que se utilicen para tareas de plomería.
Llave de mono
Similares a las llaves Stilsson, aunque con claras diferencias. Las mordazas se consiguen ajustar con un engranaje que se gira con el pulgar. Sin embargo, las mordazas son lisas y siempre están dispuestas de forma perpendicular al mango.
Se suelen usar para girar tuercas y tornillos (no es habitual utilizarlas para sujetar caños).
Estos los tipos de llaves ajustables más comunes.