Dinamométrica
Hay una herramienta que resulta muy práctica a la hora de fijar las roscas de los neumáticos, siendo completamente imprescindible para un taller. Estamos hablando de una llave dinamométrica.
Esta herramienta es bastante similar a la llave de carraca convencional (tiene una estructura parecida y también se utiliza de manera manual. Está compuesta por dos partes: mango y cabeza. Estas se pueden intercambiar entre sí en base al tipo de trabajo que se desee llevar a cabo.
Probablemente hasta este punto es posible que no entiendas la diferencia entre comprar una llave dinamométrica barata o elegir una llave de carraca. Esta primera nos da la posibilidad de ajustar el par de apriete.
En relación al precio, tanto la llave dinamométrica, cómo la llave de carraca, nos costarán más o menos lo mismo.
Uno de los problemas más graves que podemos tener con un tornillo es pasar su rosca cuando lo estamos apretando. Si esto ocurre no nos quedaría otra que probar con herramientas avanzada para quitarla, incluso hasta con una radial en casos extremos.
Para evitar que esto ocurra, podemos usar una llave dinamométrica. Con esta herramienta podemos ajustar el par de apriete, evitando que nos pasemos de los valores que el fabricante recomienda.
Tipos de llaves dinamométricas
Antes de usar una llave dinamométrica para moto, o para coche, conviene empezar con una llave normal y finalizar el trabajo con la primera herramienta. Además, ten en cuenta que esta herramienta está diseñada para apretar tornillos, no es capaz de aflojarlos.
Para no pasarnos del “par de apriete” recomendado habrá que investigar cuál es el valor que recomienda el fabricante (este viene medido por la relación de unidades NM, que significa newtons / metro).
La llave funciona siguiendo un mecanismo de par de fuerzas; esto quiere decir que aplicará 2 fuerzas iguales y paralelas sobre una tuerca, tornillo o elemento variado, consiguiendo que pueda rotar o hacer un movimiento de torsión dependiendo de lo que se busque en cada caso.
Existen varios tipos de llaves dinamométricas, pero básicamente se pueden clasificar en los 3 tipos de a continuación:
Llave dinamométrica de salto
Es el tipo de herramientas más común en cuanto a llaves dinamométricas se refiere. Tienen un componente llamado nonioque se puede ajustar para que la llave consiga perder tensión en el momento en el que consiga el apriete que se necesite. Cuando esto tenga que ocurrir, el mecanismo interno saltará y ya no podremos apretar más la llave. Esto evitará que la rosca se pueda llegar a pasar.
Llave dinamométrica digital
No eran muy comunes hace unos años, pero cada vez son más los talleres y los particulares que se deciden por ella. Las mediciones las hacen de manera electrónica y el resultado de las mismas las podremos ver en una pantalla. La gran ventaja de este tipo de llave dianométrica es que podremos saber el momento en el que hemos llegado al par de apriete con avisos acústicos o luminosos. Son muy fáciles de usar, pero al mismo tiempo suelen ser más caras que los otros modelos.
Llave dinamométrica de reloj
Es un tipo de llave muy parecida a una llave dinamométrica digital, aunque sigue sin ser digital (es una llave analógica). Para saber cuándo hemos llegado al par de apriete habrá que comprobar una aguja móvil que se irá desplazando a lo largo de una esfera de reloj.
Estas herramientas requieren de un cierto mantenimiento; los golpes pueden llegar a afectar a su equilibrado. Habrá que tratarlas con sumo cuidado y guardarlas cuando ya no las vayamos a usar.